Motivación
Nos encontramos en un momento muy particular en la historia de la humanidad; un momento crucial, puesto que la comunidad global enfrenta desafíos abrumadores. El planeta se está calentando más y los efectos de cambios climáticos empiezan a tornarse visibles, las ciudades se expanden a un ritmo acelerado, generando un entorno que dificulta la prestación de servicios básicos, atención médica, transporte, energía, seguridad pública y educación.
Adicionalmente, por cuestiones geopolíticas, ideológicas, religiosas, etc., en esta tercera década del siglo XXI, el mundo viene enfrentando seis conflictos bélicos de importancia: Ucrania con Rusia, Siria, Yemen, Etiopía, Afganistán y Myanmar. Además de otras situaciones de inestabilidad política, principalmente en algunos países de Latinoamérica y del Caribe (LAC) que propician migración de personas, destrucción de infraestructura y pérdida de vidas.
Por otra parte, la tecnología en sus diversos campos muestra avances insospechados, desde los adelantos en el espacio hasta un mayor confort en viviendas y obras. Entonces ésta se hace cada vez más necesaria para acelerar el desarrollo y facilitar el progreso. El mundo está cada vez más conectado (se han vendido 1.600 millones de teléfonos inteligentes a diciembre de 2021. Sin embargo, aún grandes segmentos de la población mundial permanecen completamente aislados del mundo moderno, del comercio y la educación.
A fin de comprender mejor las perspectivas de CTI, imaginar escenarios, ayuda a centrarse en lo que no se sabe, en lugar de lo que ya se sabe; este proceso de creación de relatos sobre el futuro, basado en factores que pueden afectar un conjunto particular de retos y oportunidades, permite lograr una comprensión más eficiente de éstos y así obtener mejores resultados.
Comprender conceptualmente escenarios ha ampliado el pensamiento mucho más allá de los modelos teóricos de innovación y difusión de tecnología, para imaginar cómo ésta, podría cambiar la vida de las personas, en todos los ámbitos de su existencia. En la Fig. 1 se presenta un breve balance entre los escenarios actuales y las respuestas que se han ido dando, para apuntar a los desafíos que se deben encarar para alcanzar la sostenibilidad de la vida en el planeta.
Por su parte, la tecnología está lista y avanzando para transformar la vida de millones de personas en todo el mundo, especialmente de todos aquellos que han tenido poco o ningún acceso a herramientas que pueden ofrecer mejoras sostenibles para sus familias y comunidades. El uso de celulares inteligentes ha hecho que usuarios efectúan transacciones bancarias; agricultores que protejan sus cultivos gracias a la alerta temprana, y compran insumos y venden sus productos; médicos que monitorean y tratan remotamente brotes de COVID 19 e influenza y otros casos con la telemedicina, etc.
Frente a estos nuevos escenarios de vida, la opción de continuar con los mismos patrones de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI) en las universidades ya no es viable. Ello motiva efectuar grandes ajustes y realizar urgentes e importantes transformaciones.